Esta Semana Santa será recordada por la inestabilidad atmosférica y la presencia de la lluvia que está siendo la nota dominante. Todos los devotos y cofrades se pasan el día mirando al cielo a
ver si el agua les da un respiro. Así han estado esta mañana los hermanos y hermanas de las hermandades de Jesús Nazareno y Stma. Virgen de los Dolores.
Las dos hermanas mayores, Inmaculada Yébenes y Encarnación Osuna, se han mostrado especialmente atenas a la predicción meteorológica y han desafiado a la lluvia. No en vano, este año la hermandad
de la Virgen de los Dolores está de estreno con su imagen restaurada en Córdoba, recuperando la policromía original del siglo XVIII en cara y manos. Además, el agua podría dañar el
patrimonio cofrade de las imágenes, mantos bordados en oro y palio de terciopelo.
Pero, la lluvia cesó a la hora de la salida y el desfile procesional se puso en marcha con la Cruz de Guía, Banda de tambores y cornetas "La Unión", hermanos ataviados con túnicas moradas y
capirotes blancos alumbrando con sus tradicionales cirios y paso de Jesús Nazareno bellamente engalanado portado por costaleros que vestían la indumentaria de la hermandad, en este caso
túnica blaca y capirote morado, y acompañado por por las autoridades religiosas. civiles y militares. Tras él, la imagen de la Virgen de los Dolores bajo palio y estrenando policromía,
expresando el dolor por el sufrimiento de la Muerte de su Hijo, acompañada de las hermanas de la cofradía, un grupo de mujeres vestidas de mantilla, junta directiva de la Hermandad y Banda
Municipal de Música. Aunque había ciertas garantías de realizar el recorrido, éste tuvo que aligerarse debido a la caída de algunas gotas de agua que obligaron a extenderlos los plásticos en
algunos tramos del recorrido, si se quería disfrutar de la emotividad de la entrada de los pasos en el tempo parroquial de San Juan Bautista. Y, bajo esas finas gotas, el Nazareno bendijo al
numeroso público congregado en la Plaza de la Iglesia, mientras que los niños y niñas levantaban sus hornazos durante la bendición; las imágenes fueron bailadas al son de la belleza de
las marchas procesionales de las bandas "La Unión" y Municipal de Música; y los vivas y aplausos estallaban en una mañana gris y desapacible cuando los costaleros las elevaban y daban
vueltas con sus vigorosos y cansados brazos.
Noticia extraída de lafuentezuela.com